miércoles, 3 de agosto de 2011

¿Crónica de una muerte anunciada?

En el intento de reinventarnos se encuentra media humanidad, y no es fácil. Mientras vemos cómo se nos desmorona la economía a nuestro alrededor y nos hacemos cruces con la situación de EE.UU, el ser humano lucha por abrirse camino en un mercado laboral cada vez más complicado, y las empresas buscar su parte del queso en las nuevas tecnologías y se descoyuntan en idear nuevas fórmulas, ideas originales que le lleven, si no al triunfo, al menos a la supervivencia.

En eso estamos todos, viviendo una época de cambios, atentos a cómo se desarrollan los acontecimientos, a toda información de interés. Investigando hacia dónde va el mercado, cómo se están desarrollando las últimas tecnologías.

Y en ello estaba cuando me he topado de lleno con un artículo publicado en El Mundo donde habla de los problemas que está teniendo Google Tv en el mercado americano. Bajo el lema "que la televisión se encuentre con la web y la web se encuentre con la televisión" Logitech creó este soporte que permitía combinar en un receptor de Tv Internet y televisión.

Pero parece que esta apuesta, de momento, no ha salido como se esperaba. No dudo que habrán contado con los mejores expertos en marketing. Ya se sabe, lo tienes todo a tu favor y luego el público reacciona de manera distinta, es algo que está en la cualidad humana.

Y es que al público le cuesta mucho hacerse a la idea de cambios tan sustanciales como estos. No sé porqué el mercado americano no ha acogido este producto con los brazos abiertos, pero si extrapolamos el producto a, por ejemplo, España, me hago la siguiente reflexión: una familia española de clase media, reparten sus horas libre de la siguiente manera:
  •  El niño pequeño (1-10): está viendo la televisión (normalmente sólo), en su habitación u otra estancia, ha seleccionado un canal de dibujos o está viendo una película en DVD.
  • El joven (12-18): está en su habitación (normalmente sólo), en el ordenador, chateando, twitteando, bajando música…
  •  El padre: está viendo la televisión, como no le apetece ver dibujos (para un rato que tiene) busca canales de deporte o en otro ordenador
  • La madre: pasa del deporte y pasa también de los dibujos, pero no del Sálvame (en cualquiera de sus versiones)
Analizado estos estereotipos (bastante extremistas, pero no por ello imposibles) mi pregunta es ¿cómo quiere Logitech que fusionemos ordenador y televisión en uno? El coste del receptor no debe ser nada barato, por lo que no creo que se compre más de uno por familia ¿cómo repartimos a esta familia? Pues igual, cada uno estará en un sitio distinto buscando ocio distinto ¿Merece la pena comprar este tipo de receptores para acabar viendo a Belén Esteban?


BSC

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